Los países de la Eurozona vuelven a la recesión

La crisis que vivimos, lejos de solucionarse, se agrava más. Lejos quedan los "brotes verdes" y la recuperación de los países de nuestro entorno. Nuevas oleadas de problemas han surgido en el Viejo Continente, prendiendo la mecha en Grecia y extendiéndose a Irlanda, Portugal, España, Italia y al final a toda la Eurozona en su conjunto. Ante esta situación, la respuesta que se promueve es la austeridad alemana, si bien es complicado en tiempos de crisis estimular la economía cuando no le ofreces los estímulos suficientes. La espiral del déficit y deuda asola al sur de Europa, que ahogada solicita ayuda al norte rico, hace sólo un año con fortaleza que poco a poco se desvanece. 

Con este panorama, ha llegado de nuevo la recesión a Europa. Para que un país se encuentre en recesión, tiene que registrar dos trimestres consecutivos de caída del PIB. Pues bien, de los 17 socios de la moneda única, entrarán en el segundo trimestre del año oficialmente en recesión España. Italia, Bélgica, Irlanda, Holanda, Portugal, Grecia, Eslovenia y Chipre. Francia, según los avances, tendrá caídas en el segundo y tercer trimestre, lo que le llevaría a la recesión. Y la Zona Euro en su conjunto ya está en recesión, pues el último trimestre del año 2011 y el primero del presente la producción ha caído (según el dato, el primer trimestre de 2012 la variación es 0,0% o -0,01%, para el caso y la situación podemos hablar de recesión).

El siguiente gráfico muestra la evolución de la variación del PIB trimestral en España. El avance del segundo trimestre por parte del INE augura otro trimestre de caída de la producción.

Italia lleva ya varios trimestres en recesión, y no se espera que salga de ella a corto plazo:

Francia, donde se observa la dinámica negativa que certifica la oficina de estadística francesa: entrará en recesión el tercer trimestre de 2012.

Alemania, con un crecimiento débil, lejos de la locomotora europea que era en 2010.

Y la situación de Reino Unido, preocupante si cabe, pero al disponer de un Banco Central que puede financiar el déficit mediante la emisión de moneda no se encuentra en el ojo del huracán. Puede tener un efecto post-Juegos Olímpicos, pues en casos como el español en Barcelona'92, tiraron de la actividad económica del país. Se rumorea que el Banco de Inglaterra puede acometer acciones para depreciar la Libra, de manera que estimule la economía.

Los indicadores de la actividad económica asimismo son negativos. La producción industrial cae y hasta la balanza comercial alemana empeora, puesto que la gran parte de sus exportaciones son a sus socios europeos. Por ello, parece que hasta el gigante alemán sucumbirá a la dinámica del resto de países de su entorno.

Hace falta un paso al frente de los líderes europeos, que tomen medidas coordinadas para tratar de sacar a Europa de la recesión, pues es una pieza de gran peso del sistema económico mundial y por tanto afecta a la economía en escala global (China ha visto reducido su ritmo de crecimiento y de exportaciones, Estados Unidos no logra despegar ni crear empleo...). Una Unión Bancaria, que limite los problemas del sistema financiero, junto con el inicio de una Unión Fiscal y políticas de estímulo de la inversión podría ayudar. Claro que ese justo es el problema: la decisión de los políticos de más Europa o menos Europa.